domingo, 28 de junio de 2009

CATASTROFES










Los principales tipos de catástrofes naturales tienen que ver con dos agentes: la atmósfera y los movimientos de la litosfera. A ellos cabe unir la caída de grandes meteoritos, pero esta es muy esporádica y no ha afectado a la humanidad en toda su historia, aunque en tiempos pasados pudo provocar la desaparición de los dinosaurios y la gran extinción del Cámbric

Asociados a la atmósfera están las inundaciones, sequías, olas de calor y de frío, grandes tormentas eléctricas, lluvias persistentes, granizo, ventiscas, grandes nevadas, huracanes, mangas de agua y tornados.

Asociados al clima, pero con efectos sobre la superficie de la tierra están las avalanchas, los corrimientos de tierra y las coladas de lodo.

Las inundaciones son, probablemente, las que más vidas se cobran en todo el mundo. Su carácter repentino y esporádico hace que las sociedades bajen la guardia y se interpongan en el camino de las aguas.

Tras una catástrofe natural las consecuencias pueden ser mayores o menores dependiendo de la gestión que se haga de ella. Siempre se ha de poner en marcha un plan de emergencia, y los habitantes de las regiones con riesgo deben tener unas nociones básicas de qué hacer. Las autoridades deben de tener un plan para evacuaciones rápidas, y determinar qué hacer en cada caso. Una de las principales cuestiones que debe de estar clara, y de manera inequívoca, es cuál es la cadena de mando.

La Geografía puede hacer mucho por minimizar los efectos de las catástrofes naturales. El buen conocimiento del territorio nos permitirá construir en las zonas con menos riesgo, y plantear un plan contra las contingencias excepcionales garantice la seguridad de la población.


Elaborado por: Viviana Dominguez Prado

No hay comentarios:

Publicar un comentario